
Llevo seis décadas, siendo comerciante de trabajo
Reyna Nereyda Barrera Hernández, primero empezó con la frutería y después la herberia
Marissa Sánchez
Un legado de sus queridos y recordados padres el señor Felipe Barrera y señora María Isabel Hernández, quienes hace más de 60 años eran grandes comerciantes primero de frutas y verduras y seguido herbaria, estableciendo su negocio como Frutería y Herberia Barrera.
Para Reyna Nereyda Barrera Hernández junto con sus 8 hermanos, fueron tiempos de aprendizaje y valor del trabajo digno, limpio con la actividad de comerciantes.
Describió que su padre a la edad de 13 años le enseñó a manejar unidades motrices y así empezar a vender de frutas y verduras y muchos productos básicos por cada sector en área rural y pesquera.
Destacó que en el ámbito de la hierberia en aquellos tiempos lo realizaba Don Antonio Cantú, pero dejó este rubro y lo retomaron sus padres, quienes derivado a tantas idas a Monterrey y otros lugares donde surtían de sus productos fueron trayendo de las hierbas y productos de la herbolaria natural y que la población iba demandando.
Señaló que de esta actividad sus hermanos lograron ser reconocidos profesionistas y ser orgullo para la familia dedicada a la actividad comercial.
Agregó que de las enseñanzas de su recordado padre las lleva presentes hoy día ya que le decía “Nunca le trabajé a nadie para que nadie le mande y haga un trabajo honrando, un trabajo limpio”.
Barrera Hernández dijo que siempre dedicada a esta actividad busca la oferta y la demanda de los productos siempre con la calidad para que se vendan pronto y seguir realizando el comercio.
Como persona de gran fe cada día pone en oración a Dios y su santo San Judas Tadeo y de la virgen de Guadalupe y a su familia que regresado a la casa celestial; que le vaya bien en su actividad comercial y a la población para que dé igual manera pueda tener recursos para comprar de sus productos.
Añadió que esas enseñanzas se les enseñó a sus dos hijos de crianza como ejemplo a que donde quiera que vayan realicen un trabajo limpio y servicio de atención para que los consumidores regresen.
Sus tareas de comercio a sus 73 años, las realiza durante todo el día ya que por más de 50 años junta cartón por la ciudad, junta botellas, prepara porciones de condimentos secos y los vende y es proveedora en muchos comercios y además atiende su negocio de hierberia.
En su actividad aprendido mucho de las hierbas como: Arnica, ruda, romero, eucalipto, hierba de venado, laurel de castilla, manzanilla, istafiate, que se consiguen con proveedores de Monterrey, Burgos y locales.
Relató que en estos tiempos de pandemia la gente consumidora acudía a buscar eucalipto y manzanilla para hacer té y apoyarse con el covid.
Agregó que la actividad comercial que realiza es un grato para seguir activa y aún en su edad espera con fe seguir realizando sus tareas para seguir adelante en este camino terrenal hasta que Dios lo permita.
Esta motivación y ejemplo lo ha llevado siempre y sus descendientes sobrinos y conocidos, siempre le han admirado por su entrega a su trabajo de comerciante.
Merecido es el reconocimiento para todos los comerciantes que desde temprana hora salen con fe de sus hogares para salir a comercializar sus productos por cada cuadra de cada sector o bien que abren su negocio y están en la espera de los consumidores que requieren de sus productos.